Tu compañero de trabajo se ha ido ya de vacaciones, y a ti todavía te queda por delante como mínimo un mes. Además, los niños han terminado el cole, la rutina familiar ha saltado por los aires y estás irascible, te enfadas por todo y discutes a todas horas.
Las vacaciones parecen no llegar nunca.
Te pasas los días hablando de ellas, esperándolas y planificando cada detalle. Estás tan impaciente porque lleguen, que el mes de julio es para ti, el peor del año, interminable, agotador, y sin darte cuenta, te lo estás perdiendo con todas sus posibilidades.
Puede que te suene de algo esta situación.
Si te das cuenta de esto, quizá quieras probar otras formas de esperar la llegada de las vacaciones. Esto puede cambiar tu perspectiva y ayudar a enfocarte en los aspectos positivos de tu vida diaria, en lugar de solo esperar el futuro.
En lugar de centrarte únicamente en las vacaciones, pueden atender a las nuevas opciones que te da este mes de buen tiempo, días largos y menos obligaciones.
Cambiar la rutina, hacer cosas diferentes que nos aporten un poquito de espíritu de vacaciones y de descanso a cada día, es una forma de adelantar las vacaciones y empezar a saborearlas.
Esto es lo que escucho, lo que me cuentan las personas comprometidas con vivir cada día:
- “Me gusta empezar el día temprano, cuando puedo sentir el fresquito de la mañana”.
- “En esta época del año siempre me apetece cuidar más mi cuerpo, me relaja ponerme una crema sin prisas”.
- “El café con hielo después de comer, me quedaría ahí”.
- “Lo mejor son los días largos y poder quedar con amigos después de trabajar, sin mirar el reloj”.
- “Sigo haciendo deporte pero es diferente, no lo planifico tanto, hago lo que me va apeteciendo y me divierto más”.
- “El paseo de las tardes por la playa”.
- “En verano disfruto releyendo cómics de mi infancia… el resto del año no lo hago, no me preguntes por qué”.
- “Ir a un cine de verano”.
- “Que sea lunes y me pueda ir con mis hijos a la piscina después de trabajar”.
- “Veo menos la tele porque después de cenar, cuando refresca, salgo a pasear con mi pareja”.
- "Será una tontería pero en verano disfruto más de leer, es mi rato de desconectar".
- (...)
Te invito a que hoy, tú también pruebes a...
regalarte un momento con olor y sabor a vacaciones.
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